Mantenimiento de coches eléctricos
Mantenimiento de coches eléctricos: qué tener en cuenta
El coche eléctrico poco a poco va teniendo más presencia, aunque todavía está lejos del coche con motor de combustión que todos conocemos. En España, se estima que hay actualmente unos 160.000 coches 100 % eléctricos. En consecuencia, el mantenimiento de coches eléctricos es una actividad inevitable para conservar la operatividad de los mismos.
Antes de comprar un coche eléctrico es probable que solo pienses en el uso que le darás y en la autonomía del coche. Sin embargo, después de comprarlo, querrás conocer más sobre el mantenimiento de coches eléctricos, puntos de revisión de coches eléctricos y otros aspectos importantes.
En este artículo hablaremos del mantenimiento de estos coches, haciendo siempre las inevitables y necesarias comparaciones con los coches de motor de combustión. De esta forma, podrás apreciar mejor las ventajas o desventajas de los coches eléctricos.
Ventajas de los coches eléctricos en comparación a los coches de combustión
Un motor de combustión es definitivamente una máquina mucho más compleja que un motor eléctrico. Este motor está compuesto de un cigüeñal, pistones, bielas, bloque, cámara de combustión, válvulas, motor de arranque, árbol de levas, etc. Además de estar sometido a elevadas temperaturas de funcionamiento en todas sus partes. Por esta razón necesita un sistema de lubricación y enfriamiento más esmerado y complejo, en comparación a un motor eléctrico.
Ventajas con relación al motor
Con lo expuesto anteriormente, podemos entender que con la compra de un coche eléctrico, no gastarás dinero ni en el filtro del aceite, ni en el filtro de aire. Tampoco tendrás que invertir en cables y bujías de encendido, así como en poleas, bomba de combustible, bomba de agua, filtro de combustible ni mangueras. Otra de las ventajas de los coches eléctricos es que ya no tendrás que cambiar cadenas, ni tendrás que realizar un mantenimiento del radiador, etc.
Los motores eléctricos son máquinas prácticamente libres de mantenimiento. Estos están compuestos de un estator de material ferromagnético y un rotor de imanes permanentes. En las ranuras del estator van alojados los devanados de alambre de cobre, los cuales producen un campo magnético giratorio. En consecuencia, el rotor de imanes permanentes se acopla al campo magnético giratorio, produciendo el movimiento del motor.
Un motor eléctrico es una estructura cerrada, la cual no necesita limpieza interior. Por otra parte, solo los rodamientos del motor pueden dañarse por el uso, pero en un periodo de tiempo muy largo. Los devanados de cobre están protegidos contra sobrecargas, por lo cual es poco probable que se quemen.
Ventajas con respecto a la caja de velocidades
Los coches con motor de combustión necesitan de cajas de transmisión automáticas o manuales. Esto se debe a que el par de motor es pequeño a bajas revoluciones, mientras que su mayor potencia la alcanza en altas revoluciones. Por tanto, en condiciones prácticas de marcha, este coche necesita de la caja de velocidades para funcionar.
Sin embargo, el motor eléctrico no tiene esos inconvenientes, debido a su principio de funcionamiento y al uso de los modernos inversores electrónicos de potencia. De esta forma, el par de motor eléctrico es alto, dentro del rango de revoluciones.
Por tanto, no necesita una caja de velocidades para transmitir potencia mecánica a las ruedas del coche.
Dicho esto, queda claro que otra de las ventajas de los coches eléctricos es que no tienen caja de velocidades. Por lo tanto, no tendrás que preocuparte del costoso mantenimiento de sus mecanismos, tales como los engranajes, embragues, rodamientos, cuerpo de válvulas, discos, bomba hidráulica, convertidor, etc.
Ventajas en relación a los frenos
Los coches eléctricos vienen con un módulo electrónico para el frenado regenerativo y dinámico. Esta técnica de frenado es muy empleada desde hace muchos años, en motores eléctricos de instalaciones industriales y trenes de carga, debido a su eficacia.
En los coches eléctricos se utiliza este tipo de frenado, en conjunto con los sistemas de freno tradicionales. En consecuencia, el mantenimiento de coches eléctricos, en relación a los frenos, es menor, ya que no hay tanto desgaste de los discos de freno, pastillas, bomba, bandas, pinzas, etc.
Otros aspectos del mantenimiento y revisión de coches eléctricos
Más allá de lo mencionado anteriormente, el resto del mantenimiento de coches eléctricos es similar a los coches de combustión. Por lo tanto, después de comprar un coche eléctrico, deberás estar pendiente del mantenimiento y alineación del tren delantero, cambio de neumáticos y cambio de amortiguadores.
Además, también deberás realizar un mantenimiento del sistema de aire acondicionado (compresor, evaporador y condensador). Por otra parte, aunque el coche eléctrico no tiene caja de cambios, sí utiliza diferencial y otros sistemas de transmisión, los cuales necesitan mantenimiento.
Al mismo tiempo, en el mantenimiento de coches eléctricos se deben revisar las conexiones eléctricas de potencia, para evitar averías. En este sentido, es importante que no hayan conexiones flojas ni puntos calientes en el motor eléctrico, batería principal, puerto de carga e inversor.
Para alargar la vida útil de la batería deberás evitar en lo posible el modo de carga rápida y el agotamiento completo de la misma. Esto es muy importante, ya que la batería es el componente más caro e importante del coche eléctrico.
GM Chamorro y los coches eléctricos
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El mantenimiento de coches eléctricos es una actividad absolutamente necesaria para la seguridad y preservación de estos vehículos. ¡Contacta con nosotros y aclaramos tus dudas!